En pleno mes de julio. Sí.
Adoro el sol de invierno. Hace frío pero calienta, es agradable, es una caricia en la piel. Es sonrisa, bienestar y picorcillo TAN suave.
Increíble. Tres de la tarde, salgo de comer. Dentro hace un fresquito estupendo y yo soy muy calurosa pero entonces... el sol, así, de repente. Me paro. No me había dado cuenta de que tengo los dedos de los pies fríos fríos fríos. Hay un espacio entre los edificios donde el sol cae a plomo. Me siento en la acera, me quito los zapatos, me froto los dedos entre sí. Es un sol de invierno. Porque hace casi frío en ese tramo desolado, porque siento que me trepa el sopor como cosquillitas en las piernas y casi oigo pop pop pop cómo me van saliendo las pecas a ambos lados de la nariz.
Cierro los ojos y cae sobre mí una lluvia de luz como un velo de caricias mientras suena el Under the Bridge de los Red Hot Chili Peppers.
Soy feliz.
aaahhh, guta :D es genial sentir el calorcito del solete (excepto cuando empiezas a oler a requemado, mal asunto)
Pues no olvides ese momento. :D
Sol de invierno...me encanta esa canción jejej
que bonito post, casi he sentido yo lo mismo leyendolo...
Un beso
Qué post más precioso, por dios. (A ver si dices en el curro que pongan el aire acondicionado a 25C, que como se te congelen los dedos de los pies, vas a tener que dejar el esquí y el paddle. QuesemueraSnoopysimiento).
Ains... pon una saharaui en tu vida, verás que bien...
Lo que más me gusta de tus post es como eres capaz de escribir los sonidos...
pop pop pop
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