El costi y yo tenemos una vecina de esas de toda la vida. Lo que se dice una vecina-vecina. Señora mayor con rodete y gafas de esas de culo de botella de champán con la que te mira y osstia tú ¡una lechuza! Ain no, uf, perdone doña Encarnita, cómo está usté.
Doña Encarnita te cuenta cómo está ella... y su marido, y su hijo el mayor, que trabaja de contable, su hija la mediana, que debe de ser la hija no deseada porque la nombra na y menos, su hijo el menor, que hay que ver qué pintas lleva y eso que es aparejador, el loro de la vecina de enfrente, un primo suyo de Valencia, su familia y, así por resumir, todo el bloque donde vivimos y familia lejana. Podríamos decir que esta vecina-vecina es lo que viene a llamarse una cotilla-cotilla. La buena señora es, además, la presidenta, así es que hace lo que le sale del rodete pero aquí nadie dice esta boca es mía contentos como estamos y hasta felices de que alguien se encargue de buscar presupuestos, contratar todo tipo de reparaciones y servicios y demás tareas coñazo de las que todos huímos como de la peste.
Doña Encarnita le riega la plantas a Manoli cuando se va, sabe cómo tiene puesta la casa Pepita y no quiere que se haga obra en el cuarto del sótano para hacer taquillas mini trasteros por si "viene gente rara extranjera de esa alquilada y a saber qué mete". A las primeras de cambio un día se me coló en casa y por poco si no tengo que sacarla a escobazos. Ahora cada vez que ve a minibere se vuelve loca y ya es la repanocha.
Pero como bien dice el refrán, si no puedes con ellos, únete a ellos, así es que también cuida del pececito de minibere cada vez que salimos de viaje.´
Por eso, el sábado por la mañana, a riesgo de que acabase por limpiarnos la casa por eso de hacernos el favor y echar un vistacillo, la llamamos para que nos hiciera el favor de avisar a un cerrajero pensando que el sábado por la mañana la puñalá sería menos grave que sacar a un señor de su cama un domingo a la 1 de la madrugada. Encarnita tomó nota, llamó al cerrajero, nos llamó a nosotros, que no podría venir, me contó su vida, llamó a otro cerrajero de confianza, que vendría el domingo por la noche, que estaba de puente. En fin.
A la media hora, otra vez Encarnita nos llama. Y esta señora de mil años como poco, con sus gafas de culo de botella de champán y su rodete mal puesto me cuenta que ha cogido una radiografía ya sabes de cuando fui a que me mirasen la rodilla que claro como me dolía con la reuma... Y NOS HA ABIERTO LA PUERTA EN UN PIS PAS. Toma ya.
He venido escorromoñá con tanto peso, pero no he podido menos que traerle dos paquetes de kilo de sobaos y dos quesadas como dos soles, ea.
Doña Encarnita, wilofiu.
Encarnita la fantástica! Joya de vecina, a pesar de los pesares :D
dame una EN
dame una CAR
dame una NITA!!!
hurra hurra y hurra
(no sé, pero me la imagino como chus lampreave en una de almodovar ... )
La madre que la trajo, esta mujer es la hostia. xD
¡¡Juaaaaas, juaaas, juaaas, juaaas!!
¡¡¡Joder, que grande!!!
Si llegáis un día de fin de semana y la casa está 'sospechosamente' más límpia que cuando os fuísteis, ¡¡ya
puedes sospechar!!
¡Que crack la Encarna! ¡Podría ser toda una 'mangui' profesional!
Si no se habla de las empanadillas de Encarna en móstoles, yo me largo!!!
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