lunes, abril 23, 2007
Pero cuántos buenos escritos olvidados habrá en los blogs porque son demasiado largos. Porque la impaciencia nos puede. Porque la pereza.
Pero cuántos relatos pretenciosos. Cuánta paja. Cuánto ego. Cuánta autocomplacencia. Cuánta mierda sin olvidar.
Qué injusto ¿no?
Sí, y cuántos buenos saboteados por ese ego y esa autocomplacencia.
Jamíademivida de mi araydemicorazón, críptica te pones. Cossa te pasa? Eh? Ando perdido por esos mundos de cables y bits y cuando vuelvo te me has vuelto masona...
Vaaa, vaaa... un besote!
Somos animales de impulsos.
Joan
He aparecido aquí por tu otro blog.
Genial! De veras!
Una pena no haber podido comentar.
Mi enhorabuena.
Un saludo!
Publicar un comentario